En comparación al polvo, su presentación hace que sea de difícil adulteración y te explicamos porqué:
Te asegura que el producto es 100% Spirulina ya que no admite posibilidad de alterar su calidad, algo que si puede pasar con el polvo, este puede manipularse y mezclarse con otras sustancias como harinas imperceptibles al ojo humano, que en el peor de los casos podría desencadenar algún tipo de sintomatología (principalmente en personas celíacas) y disminuir la calidad nutricional del producto.
Si consume Spirulina en polvo, es primordial evaluar la seriedad del laboratorio que lo envasa.
Otro beneficio de la presentación Spirulina granulada es que absorbe menos humedad y es de más fácil conservación, aunque cueste un poco disolverse al contacto con el agua, lo hace de igual manera que el producto en polvo.
El granulado lo podemos agregar a muchas recetas y preparaciones y así enriquecer nuestras comidas:
* En jugos caseros y frescos
* Licuados
* Platos fríos y calientes (los nutrientes se mantienen a temperaturas templadas, por lo que es conveniente no llevarlos a temperaturas extremas, ni tan frío, ni extremadamente caliente).
* En platos calientes se agregan después de la cocción cuando se haya apagado el fuego y aclimatado, de esta manera conserva al 100% todos sus nutrientes.
Es el producto ideal, si te cuesta o no te gusta ingerir comprimidos.
Dosificación: 2 a 4 cucharadas por día (4 medidas son 2gr. de producto)
Niños: 1/2 cucharadas
1 cuchara dosificadora (presente en el envase) equivale a 1 comprimido de 500 mg de Spirulina.